sábado, 27 de marzo de 2010

Un verano en Ibiza (3, final)

Nuestras vacaciones estaban siendo mucho mejores de lo que habría sido capaz de imaginar antes de venir aquí, pero desgraciadamente todo lo bueno llega a su fin. Íbamos a estar dos semanas y ya habían transcurrido doce maravillosos días, donde habíamos hecho realidad unas cuantas fantasías sexuales, y había perdido por completo, el número de orgasmo que habíamos alcanzado. Pero sin duda de lo que me sentía más satisfecho es de haber conseguido que Sara se desinhibiese completamente, y de hacer florecer esa zorrilla que llevaba dentro.

Por la tarde, después de la playa, estábamos tomando una cerveza en la terraza de nuestro apartamento los dos desnudos (el apartamento de al lado no se había vuelto a ocupar después de que se marcharan nuestras queridas vecinitas). Nuestros cuerpos estaban súper morenos, no teníamos ni la más mínima señal de bañador y mi novia estaba espectacularmente buena con esas tetas y ese chochito negros.

Nacho, esta noche podíamos ir a la discoteca aquella que fuimos. Todavía tenemos las entradas que nos regalaron ¿te acuerdas? lo pasé muy bien en el concurso

Claro que me acuerdo, lo tengo grabado en mi memoria ... bueno y en la cámara también ja, ja, ja. Yo también pensaba que fuéramos una de estas últimas noches para aprovechar las entradas

Esta vez prometo comportarme como una señorita ja, ja, ja ... ¿quieres que me ponga algo especial?

Te dejo elegir a ti ... prefiero que me sorprendas ... seguro que muy tapada no te vas a poner

Es que hace mucho calor, pero si quieres me pongo unos vaqueros y una camiseta, me decía con cara de niña mala

Estoy seguro de que no te vas a poner eso. Ya sabes que me encanta que te vistas como una putilla, pero ya me he dado cuenta, que disfrutas tanto como yo y que te pone muchísimo sentirte deseada

Pues si, me gusta vestirme muy provocativa, ponerte cachondo y sentir que otros tíos me miran, que me desean. Seguro que encuentro algo que no te disguste demasiado

Cenamos en el apartamento, me duché, me vestí y decidí esperar a Sara en la terraza tomándome una copa tranquilamente, para darle todo el tiempo que necesitase para arreglarse. Ya os conté que me dejó boquiabierto el primer día que fuimos a la discoteca, pues esta noche no iba a ser menos impactante.

La ropa que llevaba es fácil de describir, sobre todo por la poca cantidad. Esta vez se había puesto un vestido blanco de tirantes que la hacia guapísima, ya que resaltaba sobre su moreno espectacular. El vestidito en cuestión era bastante ajustado, no era excesivamente corto, le llegaba hasta un poco más arriba de la mitad de los muslos, pero tenía en los laterales una raja de unos 20 cm, que casi le llegaba a la altura de las caderas, permitiendo ver sus estupendas piernas enteras, y gracias a que se le ceñía, no se le veían el resto de sus encantos. En la parte de arriba, la espalda la llevaba completamente al aire, hasta el principio de su tatuaje en los riñones, mientras que por delante tenía un gran escote que a duras penas contenía sus tetas. Al ser blanco, se le transparentaban los pezones y ponía de manifiesto que no llevaba sujetador ni tanga. Tenía puestas las sandalias de la otra vez, de 10 cm de tacón, lo cual hacia que su figura luciese más esbelta, y se había pintado mucho los ojos y los labios, acrecentando el aspecto de golfa buenorra que presentaba. En definitiva estaba maravillosa, me encantaba ver a mi novia así, iba casi desnuda, bueno mejor, llamaba más la atención yendo así de provocativa

¿Te has quedado sin palabras? ... ¿no te ha gustado? quizás es demasiado tapado y por eso no dices nada

Joderrrrr mi vida estás impresionante ... ¿demasiado tapado? Por el escote se te casi se te salen los melones, por detrás casi se te ve el culo, y con las rajas esas, casi se te ve todo

Entonces ¿no te parece bien?, si quieres me cambio me decía con voz melosa para picarme

Pero que guarrilla estás hecha. Sabes bien de más que me has puesto muy caliente y que me parece inmejorable lo que te has puesto, estás muy sexy y eso me vuelve loco

Nos fuimos hacia la discoteca que tenía un ambientazo, como es lógico en pleno mes de agosto. A pesar del montón de bellezas que había, Sara seguía llamando la atención y un montón de tíos se fijaban en ella, lo cual me gustaba muchísimo. Como teníamos vales de consumición, que nos habían regalado en la fiesta de las camisetas mojadas, nos fuimos a tomar un par de copas cerca de la barra donde había menos mogollón de gente y así poder besarnos, y bailar más tranquilos. Sara me estaba poniendo muy caliente, ya que se arrimaba mucho a mi, no paraba de besarla y tocarla el culo mientras nos movíamos con la música.

Cuando nos terminamos los dos cubatas nos fuimos hacia la pista para ver las bellezas que por allí había. Nos pusimos a bailar en ese ambiente desenfrenado que hay en las discotecas de Ibiza, mi novia se movía de forma espectacular y ya había mucho ojos posados en ella. Como hacia mucho calor y ya llevábamos un rato le dije a Sara que iba a por otra copa, y ella se quedó allí poniendo más caliente al personal. Cuando volví tenía un par de babosos a su lado, pero ella se abrazo a mi y empezó a besarme para quitárselos de encima. Era la tercera copa que se tomaba y ya notaba los efectos del alcohol sobre ella.

Estuvimos un rato más y nos fuimos a por otra copa los dos y cuando nos acercábamos a la barra vimos a Hans que iba con unos amigos y amigas:

Hola Hans le saludamos, yo estrechándole la mano, y Sara con dos besos algo más que efusivos

Hola nos contestó. Se notaba que tanto él como sus amigos también habían bebido bastante. Recordar muchos vosotros, otro día pasar muy bien en playa añadió

Nosotros también nos hemos acordado de ti, le decía Sara mientras le agarraba por la cintura. Nos lo pasamos de miedo, volvimos otro día más a esa playa y no te vimos

Si, hemos recordado entre nosotros lo bien que lo pasamos los tres, añadí yo con una sonrisa de oreja a oreja

Amigos alemanes tienen un barco bueno ... mañana no, al otro, vamos a salir ¿venir con nosotros?. La mano de Hans estaba a estas alturas acariciando el culito de mi novia

No queremos molestar, seguro que a tu amigo no le parece buena idea meter a dos desconocidos en su barco

No problema, mi amigo tu amigo. Nos llevó al grupo de chicos y chica alemanes y nos presentó. Quedamos para dentro de dos días por la mañana en un pequeño puerto para pasar el día navegando, comiendo y bañándonos

Nacho, estoy un poco borracha, nos podíamos ir al apartamento que estoy muy caliente y tengo muchas ganas de que me folles, me dijo Sara cuando nos quedamos solos

A ti te ha puesto caliente el alemán, pero no te preocupes que yo me encargo de que se te pase la calentura

Nos fuimos besándonos y magreándonos camino del coche, no pusimos en marcha ya que era más que evidente que teníamos unas ganas locas de llegar a nuestro apartamento, hasta donde habría unos 15 km. Nada más salir de la zona iluminada, Sara me dijo que se sentía muy incómoda con ese vestido ajustado y al igual que el primer día se quedó desnuda en el coche, me desabrochó la bragueta y se puso a chuparme la polla. Entre lo que había bebido y la succiones que me estaba haciendo mi novia no era fácil tener el control. No llevaríamos ni dos minutos en está situación cuando dos motos de la Guardia Civil se pusieron a nuestra altura, la verdad es que no me había dado cuenta de su llegada ya que no tenían encendidas las luces azules que los identifican. Uno de ellos se puso delante de nosotros y nos fue señalando para que nos saliésemos de la carretera tras meterse en un camino de tierra unos 20 metros. Ya os podéis imaginar la situación, a mi me dio tiempo de guardármela en el pantalón, pero Sara entre lo borracha y lo nerviosa que estaba solo le dio tiempo a cubrirse un poco con el vestido ya que no atinaba a ponérselo. Una vez que paramos se colocaron al lado de las ventanillas delanteras enfocándonos con una linterna

Buenas noches señores, dijo uno de ellos mientras se quitaba el caso. No parecía que condujese de una forma muy segura, vamos a realizarles un control de alcoholemia y una inspección por si tienen drogas en su poder

Oiga si no estábamos haciendo nada malo y nosotros no hemos consumido drogas en nuestra vida, dijo envalentonada Sara

Has visto esta tía, está desnuda, le va chupando la polla y dice que no es nada malo, como mínimo conducción temeraria y escándalo público. Venga salid del coche que vamos a ver si lleváis algo encima, decía el mismo de antes, que parecía llevar la voz cantante

Bueno vale, pero deje que se ponga el vestido, sugerí para tratar de que la cosa no fuese a mayores

Fuera tal y como estáis no quiero que escondáis o tiréis alguna bolsita con pastillas

Pues ahí estábamos los dos, Sara completamente desnuda únicamente con los zapatos puestos, lo que le daba un aspecto muy sexy, alumbrados por un par de linternas. Me registraron en primer lugar y no encontraron nada, ahora iban a por mi novia

Bueno, pues no sé donde voy a esconder algo si no llevo nada encima, dijo protestando Sara

Señorita, haga el favor de callarse, podemos llevarles al cuartel y dejarlos allí un par de días solo por lo que han hecho. Venga le dijo a su compañero que seguía callado, regístrala a fondo, y tú, si protestar que te ponemos las esposas y te metemos en el calabozo

Esto nos amedrentó bastante e hizo que nos callásemos. El otro guardia, que ni siquiera se había quitado el casco, abrió las piernas de Sara que estaba apoyada en el coche, sacó su porra y ante mi más completo asombró la puso en la entrada de su chochito, después de restregársela un poco se la enseño al otro que mandaba

Ya veo que esta zorra protesta mucho, pero está chorreado la cacho guarra, sigue con la inspección

Comenzó a meter la porra en el coño de mi novia, debía tener unos 5 cm de diámetro, pero entraba sin ningún problema, habíamos tenido una noche muy caliente y estaba suficientemente lubricada. Se la introdujo unos 20 cm y luego empezó a masturbarla sin ninguna dificultad, cuando salía del coñito la porra brillaba por el flujo vaginal. La cara de Sara había cambiado, ya no estaba cabreada, se le notaba que disfrutaba de la situación y sus caderas se movían de forma acompasada con el movimiento, además, el guardia también le sobaba sus preciosos melones

Joder con la golfa, como le gusta que la follen, vaya una zorra de novia que tienes, está buenísima

La verdad es que está muy buena ... y le gusta mucho follar, no hay nada malo en eso, contesté

Por supuesto que no, pero como protestaba antes tanto, ahora no dice nada la muy putilla

Sois unos cabrones dijo Sara, pero ya que no puedo hacer nada por evitar esta situación, mejor disfrutarla ¿no te parece?

Ja, ja, ja es una auténtica golfa ... pero no se te olvide revisar el otro agujero, no vaya a ser que guarde alguna sorpresa. Métele un par de dedos en ese culazo que tiene ya verás como le gusta a la muy zorra

Ahí estaba Sara delante de dos guardias, desnuda y abierta de piernas, mientras le metían una porra por su coñito y un par de dedos en su ano. Ya no se reprimía a la hora de mostrar que estaba disfrutando, se le escapaba algún gemido y la situación, al igual que a mi, la estaba poniendo muy cachonda. Además siempre le había gustado fantasear con tíos uniformados, una vez en unos carnavales, me pidió que me vistiese de bombero ya que decía que le ponían los uniformes, y alguna vez, también me había pedido que simulase que la forzaba, ya que le ponía caliente imaginarse que la violaba.

Esta tía es el mayor putón que he visto en mi vida, cada vez engulle más la porra, cómo está pasándoselo la muy zorra

Siiiii ... dame más ... joderrrrrr como me gusta gritaba ... siento ese pedazo de verga en mi coño caliente ... sigueeeeee ... no paresssssss ... ahhhhhhh ... si, si, si ... mueve tus dedos en mi culo ... me quiero corerrrrrrrr ... ohhhhhhh ... másssss dame más cabrón ... ahhhhhhhhhhhhhhhhh

Fue espectacular ver como se corría Sara, mi polla estallaba dentro de mi pantalón y seguro que la de los dos guardias también, pero era evidente que al menos ellos se iban a querer desahogar, aunque había una sorpresa que no me había podido imaginar

Vaya una zorrita que nos hemos encontrado, dijo el que había hablado hasta ese momento. Vamos a hacer una cosa le dijo a su compañero masturbador de mi novia, quítate el casco para que te vean

Cuando se quito el casco, Sara y yo nos quedamos de piedra, salió una melena ondulada de una tía joven que sin ser guapa no estaba mal

Os presento a mi compañera. Ja, ja, ja ... menuda cara se os ha quedado, no se os había ocurrido pensar que era una tía. Pues es mi subordinada que hace lo que le mando

La verdad que no, le contesté. Bueno, ¿no podemos ir ya? No habéis encontrado nada. Aunque la situación me había puesto muy caliente, ese guardia tan cabrón, me ponía un poco nervioso

Vamos a hacer una cosa, me voy a olvidar de llevaros al cuartel por conducción temeraria y de hacerte la prueba de alcoholemia, si ganáis el juego que os voy a proponer. Tu novia me va a hacer una mamada, y a ti, te la va hacer mi compañera. Si consigues aguantar más que yo sin correrte os dejamos marchar, es decir si tu amiguita es una buena chupadora de pollas no tendréis ningún problema, ahora te aviso, esta zorra, dijo señalando a la guardia, la mama de vicio

Al fina y al cabo no teníamos otra elección, además la situación nos estaba encantando una barbaridad, con lo cual nos pusimos manos a la obra. Las dos se pusieron de rodillas, una con su uniforme y la otra desnuda, nos bajaron las braguetas y sacaron las pollas de los pantalones. El guardia no tenía una polla muy larga unos 14 cm, pero si bastante gorda, Sara alternaba metérsela todo lo que podía en la boca, con intensos chupetones en el glande. Mientras, a mi me estaban haciendo un trabajo de primera, ninguna tía que me la había mamado, había conseguido introducírsela entera, pero ella parecía tener una capacidad innata para engullir mi verga hasta la base. Era espectacular ver como mi cipote desaparecía entero en su boca. Los huevos me los sobaba constantemente, y de vez en cuando se sacaba el falo de la boca para comérselos con un ansia descomunal.

Ni que decir tiene que tuve que mirar al cielo y repasar todas las constelaciones para no correrme en esos maravillosos labios que no paraban de succionarme. Afortunadamente Sara era una estupenda mamadora y estaba realizando un trabajo sensacional

Joder que cacho zorra de novia tienes, estoy a punto de correrme, es un auténtico pendón. Quiero que no dejes escapar ni una gota de leche, que te tragues todo mi semen puta, que eres un auténtico putón. Siiiiii ... cabrona ... chupaaaaaaa ... te voy a llenar esa boca de guarra ... ahhhhhh ... me corrooooooooo ... ohhhhhhh ... siiiiiiiiii

El tío debería llevar bastante tiempo sin eyacular, ya que a pesar de todos los esfuerzos de Sara, el semen rebosaba por su boca. Pero ella no dejó que se perdiese nada, fue lamiendo el capullo hasta dejarlo reluciente y con la mano recogía la leche que escurrió para lamerla y tragársela. Entre esa visión tan excitante y el trabajito que me estaban haciendo, ya estaba que no podía. Agarré con fuerza la cabeza de mi chupadora y me corrí con todas mis ganas en su boca. Mientras eyaculaba ella no paraba de chupar y no dejó escapar nada, se notaba que sabía dar placer a un tío con esa maravillosa boca, no paro de moverla hasta que estuvo segura de que había terminado mi orgasmo completamente

La chupa de maravilla, me decía el guardia Y no deja escapar nada de leche, no como tu novia que no ha podido tragarse toda mi corrida

No me extraña dijo Sara, en mi vida había visto una corrida tan impresionante, tenías los huevos cargados de leche, debía hacer bastante que acumulabas sin descargar

Si, hacia un poco, pero parece que te ha gustado que sea así, me has parecido una glotona que has relamido todo

La verdad que aunque suene un poco a zorra, he de reconocer que me pone muy caliente ver como un tío se corre, sobre todo cuando lo hace dentro de mi. Te han salido un montón de chorros calientes que notaba como entraban dentro de mi garganta, pero era tal la cantidad, que rebosaba de mi boca

¿Y tu compañera? pregunté, ¿nunca habla? ¿no le gusta que la follen y correrse como hemos hecho el resto?

A esta putilla no le tengo permitido hablar cuando estamos en este tipo de situaciones. Le excita ser humillada, sentirse una zorra depravada a la que utilizo sin miramientos, y además, lo que le pone realmente, es saber que va a dar mucho placer, pero que a ella no le van a follar, que no se puede tocar, eso lo reservamos para cuando nos quedamos solos, y la muy golfa, llega que explota de lo caliente que está

Es todavía más zorra que tú, le dije a Sara. Me he vuelto a empalmar con esto que ha contado, dije señalando a mi pene que todavía seguía fuera del pantalón

Pues yo me he quedado con ganas de follarme a tu novia y mi polla ya está lista para entrar en acción otra vez

A mi me encantaría que te corrieses en mi coñito otra vez, esa cantidad de semen que produces me ha puesto muy caliente

La verdad es que había pensado en follar tu culo, cuando te ha metido los dedos parecía que se dilataba bien, vamos que no eras virgen por detrás

Aunque no te lo creas, lo era hasta hace unos días, pero la idea me parece estupenda

Sara dobló su cuerpo y apoyó las manos sobre el capó del coche ofreciendo su culo al guardia. Puso su polla contra el ano y se la introdujo sin ningún problema, se notaba que el ojete ya se había dilatado mucho los días anteriores y no ponía resistencia. La compañera sin que nadie le dijese nada se arrodilló y se puso a comerle el coño a mi novia. Le metía la lengua hasta el fondo, y cuando le lamía el clítoris aprovechaba para meterle un par de dedos. Mi novia gemía de placer, estaba disfrutando mucho y yo mientras tanto me estaba haciendo una paja. No hacía falta mirarla para saber que le está gustando... sus chillidos eras escandalosos

Ven aquí que te chupe la polla me dijo Sara. ¿Te gusta verme cómo me da por culo este cabrón y cómo esta zorra me chupa el coño?

Me vuelve loco ver como disfrutas, como te gusta ser un golfa que la folla cualquiera

Tengo ganas de que este cabronazo me llene el culo con su leche, como antes ha hecho en mi boca. Cuando hablaba se sacaba mi polla de la boca pero no dejaba de meneármela. Y tú quiero que te corras en mi cara, que parezca una puta con todo su semen

Esta tía me pone muy cachondo, es una calienta pollas auténtica, vaya culazo que me estoy follando

Siiiii vamos quiero que me revientes el culo, que me des bien, que me la metas hasta el fondo, soy una puta gritaba

Ahhhhh, putaaaaaaa claro que te voy a reventar ... te voy a dar toda mi leche ... siiiiii furciaaaaa ... tomaaaaaaaaaa ... me corroooooo ... ahhhhh ... ohhhh ... me muero de gustooooooooooooooo

Vaya cabronazo, noto como su leche inunda mi culo, joder que bien me ha follado. Ahora quiero que te corras en mi cara, quiero todo tu semen, me encanta el semen ... soy una zorraaa ... siempre quiero más

Sigue meneándomela zorra, siiiiii ... toma mi semeeeeen ... ahhhh guarraaaaaa ... viciosaaaaaa ... que placeeeeer

Joder, yo también me voy a correr ... me encantan los rabos .. que me llenen de leche ... siiiiiii ... soy tu puta ... una golfa ... ahhhhh ... diooooooooos ... soy una guarraaaaaa ... ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhh

Habíamos quedado los tres exhaustos y la guardia se dedicó a lamer los restos de semen de la cara y del culo de Sara, desde luego, era muy zorra, estaría a punto de reventar por la calentura. Nos despedimos de los dos muy amistosamente, y continuamos nuestro camino hacia el apartamento. Esa noche caímos rendidos en la cama, lo que parecía que iba a ser una experiencia desagradable con la Guardia Civil se convirtió en una experiencia brutal que nunca olvidaremos.

Al cabo de dos días nos reunimos con Hans en el pequeño puerto donde habíamos quedado, era nuestro último día en Ibiza, ya que al día siguiente partíamos hacia la península. Nos llevó a un barco de motor muy bonito que mediría unos 6 metros de largo por unos 3 de ancho. Allí estaban un grupo de alemanes y alemanas tomando unas cervezas y escuchando música, todos en bañador y en bikini. Ellos eran tres chicos, uno no muy alto de 1,70 m que era el dueño del barco, bueno, en realidad el dueño era su padre, que por lo visto estaba forrado de dinero, otro que sería más o menos como yo 1,80-1,85 m, que era el más amigo de Hans y se llamaba Frank, y el tercero, que debería andar cerca de los dos metros y que sin estar gordo, solo por lo fuerte que estaba debía pesar cerca de 100 Kg. Los tres eran más o menos rubios y bastante agradables físicamente. Las chicas eran dos, que contrastaban notablemente, una era casi tan alta como yo, rubia, muy guapa, caderas poderosas y enormes tetas que apenas podía contener su pequeño bikini. Mientras que la otra, aunque también era alemana, era de padres asiáticos, según nos dijo, morena, pequeñita, cuerpo completamente longilíneo, apenas tenía pecho, y sin ser guapa, tenía una cara muy simpática.

Afortunadamente, excepto Hans, todos hablaban un casi perfecto castellano con marcado acento germánico, ya que por lo visto, veraneaban en la isla desde pequeños con sus padres. Nos recibieron de una forma muy amistosa y enseguida pusieron en marcha el barco. La idea era recorrer la parte norte de la isla, buscar alguna cala que no tuviese acceso a pie para fondear el barco y poder bañarnos tranquilamente. Había comida con lo cual podíamos pasar el día entero. Sara estaba muy guapa con su melena al viento, llevaba puesto un pantalón muy cortito blanco, que permitía ver el nacimiento de los glúteos de lo diminuto que era, y tan ajustado que se le marcaba tanto por delante como por detrás, y un top, también blanco, anudado al cuello, que tan solo llegaba por debajo de sus pechos.

Observar la isla desde el mar era una preciosidad, estuvimos como una hora y media recorriéndola, mientras tomábamos unas cervezas, y fuimos en busca de una playita que ya conocía el dueño del barco, para ver si no había ninguno más y podíamos estar solos. La cala era muy pequeña, de unos 25 metros de largo por unos 5 de ancho. El agua era verde, cristalina, con arena blanca y era imposible el acceso desde tierra. Tuvimos suerte y no había ningún barco, echamos el ancla a unos 30 metros de la costa y desde allí iríamos nadando o andando, puesto que no cubría, nos llevamos cerveza y la comida.

El plan era una maravilla, sin embargo noté que Sara estaba algo nerviosa y no sabía que le pasaba, se acercó y me dijo

Cariño, tengo un pequeño problema. No me he traído bikini, ni siquiera la parte de abajo. Y con esto no me puedo bañar, se me transparenta completamente al ser blanco ... además se notaría mucho que no es para bañarse

Pero como eres tan zorra de venir sin nada, creía que lo llevabas en el bolso, o que te habías puesto el tanga

Si, si, zorra. Ya no te acuerdas que me dijiste que no querías que me pusiera ni ropa interior ni bikini durante nuestra estancia en Ibiza, pues eso he hecho obedecerte, me decía riéndose

No se me había pasado por la cabeza, suponía que hoy harías una excepción, vaya una putilla que eres ... ja, ja, ja

Me llamas putilla y lo único que hago es ser tu esclava y acceder a tus deseos, desde luego ...

Bueno, pues ya sabes lo que te toca, bañarte en pelotas. A mi no me importa y seguro que éstos están encantados

A mi me da un poco de corte ya que ninguno está desnudo, si todos estuviésemos, no habría ningún problema, pero yo sola. Bueno por lo menos tu me acompañaras

No, no ... quiero exhibirte bien y que vean lo golfa que puedes llegar a ser. O sea que venga

Eso de que le daba un poco de corte, no se lo creía ni ella. Se puso de pie, se desató el top del cuello y dejo ver sus hermosas tetas. En ese momento, todos se le quedaron mirando, incluidas las chicas, sobre todo cuando deslizó su ajustado pantalón por sus caderas para quedarse con el chochito al aire. Uno de los alemanes empezó a aplaudir y a silbar ese striptease improvisado en la cubierta del barco, y todos los demás, le siguieron en la ovación, incluso me pareció oír algún ¡viva España¡.

El dueño del barco y Hans se solidarizaron con Sara quitándose el bañador. Hans la tenía morcillona, pero al otro se había empalmado completamente, aunque la verdad es que la tenía un poco pequeña y delgada. Fuimos nadando a la playa desierta, nada más llegar, la dos chicas se pusieron en top less, la rubia tenía unos melones preciosos redondos, enormes, grandes areolas, muy morenos. La chinita no tenía prácticamente tetas, ahora, tenía unos pezones que te podían saltar un ojo, era como si siempre los tuviese erectos, le hacían muy sexy. Frank y yo también nos quitamos los bañadores, sin ser una barbaridad, estaba muy bien dotado. Nos tomamos otra cerveza y nos pusimos a jugar en el agua, subíamos al las chicas en nuestros hombros y hacíamos peleas de caballos. Al principio Sara era mi pareja, pero luego fuimos cambiando y fue refregando su chochito, sin ningún tipo de pudor, en la cabeza de los otros cuatro. El jueguecito y las cervezas hicieron que nos calentásemos más de la cuenta

Bueno, no es justo que estemos aquí desnudos nosotros cinco y vosotros tres estéis todavía tapados, dijo una desatada Sara, que cada día me sorprendía más gratamente con su falta de pudor

Eso dijo Frank, al fin y al cabo, estamos entre amigos y no hay nadie más en la playa

Las chicas se fueron quitando la parte de abajo al ritmo de los vítores de los chicos, ambas tenían el pubis rasurado, no se les notaba la señal del bikini y la rubia tenía unos labios muy hinchados. Solo quedaba el alemán grandote, las chicas empezaron a animarle, y él, se bajo el bañador de espaldas mostrando su culo, luego se dio la vuelta y enseño un cipote enorme. El tío la tenía en semi reposo, debía medirle cerca entre 18-20 cm y la tenía muy gorda, parecía un caballo. Sara se quedo boquiabierta, no podía quitar la mirada de ese pollón.

En estas situaciones lo difícil es romper el hielo, y seguramente, el resto se cortaban ya que nosotros éramos la única pareja. Recordé que la otra vez con Hans había funcionado lo de hacernos unas fotos, así que sugerí, que ahora que estábamos todos desnudos podíamos inmortalizar el encuentro. A todos les pareció muy buena idea, nos hicieron unas fotos a nosotros dos, luego otras en grupo, después, decidimos que las tres chicas solas. Era una maravilla esos tres cuerpos desnudos, con sus tres coñitos rapados, les hice fotos en la arena, bañándose, de sus culitos, con las piernas abiertas ... . Luego cambiamos y nos hicieron fotos a los chicos juntos

Bueno quiero esas pollas bien arriba, decía una Sara que estaba lanzadísima, secundada por sus dos compañeras

Con una buena estimulación seguro que lo conseguís, aunque conmigo no vais a tener problemas ja, ja, ja, decía el dueño del barco, mostrando su pequeño pene en erección

El espectáculo de las fotos a las tres chicas nos había puesto a los cinco chicos muy calientes, y exhibíamos sin pudor, nuestros mástiles inhiestos. El alemán grandote ahora estaba empalmado y su verga debía medir unos 24-25 cm, vaya cipote que tenía el cabrón, y además, bien gordo

¿Por qué no nos haces una foto a nosotras dos con tu novio? Le pregunto la rubia a Sara

Muy bien, pero ahora quiero que sean un poco más atrevidas les contesto riéndose

Me puse de pie en medio de ellas, agarrando a ambas por la cintura, después de espaldas deslizando mi mano hacia sus protuberantes culos. Nos tumbamos en la arena y ellas se sentaban encima de mi, les agarraba las tetas, al principio, un poco disimuladamente pero luego ya muy descarado, mientras Sara nos fotografía con una sonrisa en la boca e incitándonos a que las fotos fuesen más picantes

Nacho, ábreles un poco más las piernas para que se le vea bien esos coñitos que tienen. Y a ellas le decía que me cogiesen la polla, para que comprobasen si estaba dura

Bueno Sara, ahora te toca hacerte unas fotos a ti con los alemanes, le dije después de notar como el ambiente se había caldeado mucho

Allí estaba mi novia en medio de los cuatro tíos, primero les hice una foto donde ella estaba en medio, luego la cogieron en vilo entre los cuatro a lo largo de tal forma que ella les tapaba la cintura, después la cogían por sus piernas y brazos quedando completamente abierta. Les dije que pusiesen sus manos en el cuerpo de ella, para que así la taparan, de esa forma, empezaron a tocarla las tetas y el pubis. Ella se sentó en la arena y quedó rodeada de las cuatro pollas apuntando a su cara, le pedí que las fuese cogiendo de dos en dos, y así, le iba haciendo más fotos.

Pero ahí Sara ya no se pudo resistir más, paso de tocarlas a succionarlas con sus labios, fue chupando una a una, sobando y metiendo en su boca sus duros huevos, hasta dejar para la última, el pollón gordo que casi no le cabía, pero que lamía de arriba abajo sin dejar un solo centímetro sin recorrer por su lengua. Ella se puso de rodillas, continuó con las mamadas que estaba haciendo pero ahora esa posición le permitía agarrar dos vergas con sus manos, así podía tener más pollas a su disposición que era lo que realmente le ponía.

Miré hacia atrás, la escena había puesto muy caliente a las dos alemanas, ya que estaban en la arena besándose en la boca y acariciándose mutuamente sus chochitos. Cuando me vieron me hicieron una señal para que uniese a ellas. Me tumbaron en la arena, sin dejar de tocarse, ocuparon sus bocas en mi hinchada polla, que se erguía en medio de las dos pero no separándolas, si no uniendo sus lenguas alrededor de mi glande rojo.

La postura en la que estaba, además de cómoda y excitante, resultaba perfecta para poder ver las andanzas de la zorra de mi novia. Estaba tumbada y se la estaba follando el de la polla pequeña, Sara era muy lista y seguro que quería empezar de menos a más, mientras que no paraba de acariciar y chupar las otras pollas que estaban a su alrededor. El tío se corrió enseguida, ella le limpió los restos de semen con la lengua y su lugar en el coño lo ocupó una polla que ya conocía, la de Hans. Mientras tanto la rubia, se había puesto a cuatro patas, le puse mi capullo en la entrada de su chochito y la penetré hasta los huevos sin ninguna dificultad, tenía un coño amplio, lúbrico, dilatado ... muy acogedor. Según la follaba, la cogí del pelo, tirando de su cabeza hacia atrás, como si fuese una vulgar puta y le sobaba esos enormes melones que tenía, lo cual pareció gustarle por los gritos que daba. Su amiga le metía dos dedos en ese enorme culazo y se acariciaba el clítoris.

Hans estalló de placer, y Sara recibió en su chochito la segunda inundación de semen, la cabrona se le notaba que estaba disfrutando al máximo. Nada más terminar Hans sacó la polla de Frank de su boca y se la metió en su entrepierna, ya tenía otra salchicha alemana sustituyendo a la anterior

Joder, quiero que me folléis todos ... soy una puta que se muere por correrse ... quiero que me deis toda vuestra leche, gritaba como una zorra desesperada que no podía más

No te preocupes, que te voy a dar todo mi semen. Eres un putón, estaba a punto de correrme en tu boca, pero prefiero hacerlo en tu coño. Es la primera vez que me voy a correr en un coño lleno de semen. Siiiiiiii ... eres una golfa... ahhhhhhh ... putaaaaaaaa

Siiiiiiiii ... soy una puta ... y me gusta que los cabronazos como tú me folléis ... ahhhhhhhh ... sigueeeeeeeeeeeeee ... que placerrrrrrr ... ohhhhhhhhhh

La rubia a la que me follaba, no aguanto más, gimió como una perra en celo, se restregaba su mano con su clítoris mientras alcanzaba el orgasmo, cayendo rendida sobre la arena. Yo, tuve que contenerme, ya que a diferencia de los cuatro alemanes que tenían que satisfacer solo a mi novia, yo tenía dos tías para mi. Nada más terminar, su amiga se abrió de piernas para sustituirla, pero a diferencia de ésta, que tenía un coño enorme, su chochito, como había oído comentar de las asiáticas, era estrecho, de tal forma que mi polla se tuvo que abrir paso en su cueva cálida de carne que envolvía a mi verga según se abría paso hacia su interior. Su coño estrangulaba amorosamente a mi cipote sintiendo como esa carne ardiente lo aprisionaba. En un par de minutos su amiga se había recuperado y se puso tumbada en la arena a comerle el clítoris

Sara estaba a punto de realizar lo que había deseado hacia rato, y era, introducirse ese pedazo de polla. Imito a la china y se puso en la postura del perrito, de tal forma que estábamos unos en frente de otros, con las dos chicas separadas por un par de metros. Era fabuloso ver como ese pollón se abría paso por los labios vaginales de Sara, para insertarse en su coñito chorreante, y como a mi novia se le desfiguraba la cara por el placer de sentirse tan llena como jamás lo había estado. Una vez que se la introdujo entera, pasó a bombearla de una forma rítmica, golpeando con los huevos en el culo de ella, era bestial ver como esa tranca se introducía en el coño de mi novia, a ella también se lo parecía

Fóllame cabrón ... que pollón tienes ... es la mejor polla que he visto en mi vida ... me moría de ganas de tenerla en mi raja ... siiiiiiii ... que bien me dasssss ... métemela hasta dentro

Eres una zorra, tienes el conejo lleno de semen y todavía quieres más, eres muy guarra

Si quiero que descargues en mi coño, que me llenes como lo haces con ese cipote enorme. Vamos carbón córrete que ya estoy a punto otra vez

Siiiiiiiii ... tomo golfaaaaaa, putaaaaaa ... eres la tía más zorra que he conocido ... que bien follas ... ahhhhhhhhh ... me corrooooooooo ... ohhhhhhhhhh ... siiiiiiiiiiiii

Soy una puta, mi me gusta, quiero ser muy zorraaaa ... siiiiiiii ... dame toda tu leche ... quiero que me inhundes ... dame todo lo que tengas dentro ... no te quedes con nada ... siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii gritaba la muy puta en un orgasmo fantástico. Joder, que maravilla, vaya cantidad de semen que tenías cabronazo dijo tras unos breves instantes, y se veía, como su coño rezumaba semen de los cuatro tíos por todas partes. Ella lo recogía con sus dedos y los chupaba con cara lujuriosa, no dejando que se desperdiciase nada, menuda puta estaba hecha

No sabía que me excitaba más, si ver como se tiraba a Sara ese tío de la polla enorme o la follada que le estaba realizando a la chinita del coño estrecho. El caso es que ya no podía más, me corrí de una forma brutal, a la vez que mi compañera de polvo que temblaba de forma compulsiva mientras descargaba mi leche sobre ella. La chinita cayó rendida, con el chochito chorreante de mi semen. Su amiga se puso a lamerle el coño con la mezcla de mi semen y su fluido vaginal, provocándole otro pequeño orgasmo.

Una vez que habíamos terminado todos, nos bañamos, tomamos el sol, disfrutamos del día playa que teníamos por delante y fuimos a por más comida al barco, para reponer fuerzas

Joder Sara, te podrás quejar, cuatro pollas para ti solita y encima una de ellas una bestialidad

Ha sido maravilloso, me ha encantado sentirme llena de semen .. ser follada por esas vergas, y sobre todo, ese pollón ... no veas como se siente con un cipote así de grande dentro del coño

Después de comer, decidimos descansar un rato, para dormir la siesta mientras tomábamos el sol. Luego nos bañamos, por supuesto seguíamos todos desnudos, y Sara empezó a juguetear otra vez con los alemanes, parecía que todavía no se había quedado satisfecha. En el agua, les iba tocando las pollas sin ningún disimulo y ellos le metían mano a la mínima oportunidad. En una de esas, en la orilla, tumbó al alemán de la polla enorme y empezó a follárselo sin más preámbulo, cabalgando sobre él, con sus tetas en un movimiento oscilante precioso. Las dos alemanas hablaban entre si, se rieron, se acercaron a mi y acabamos los tres en el suelo. La de las tetas grandes se tumbó boca arriba y puso mi pene entre sus enormes melones haciéndome una cubana. Su amiga se colocó de tal forma que recibía en su boca a mi polla según salía de los pechos de su compañera, aprovechando para comerle y tocarle los pezones, además no perdían el tiempo y se masturbaban con la mano libre que tenían.

En la posición que tenía podía ver todo lo que hacía Sara, que por supuesto no quería perdérmelo. Los otros tres alemanes se habían colocado alrededor de ellos, Hans dobló a Sara sobre el pecho de su amigo, de tal forma que ahora tenía expuesto su ano. Le metió primero un dedo primero para ver que estaba dilatado y como pasó sin ningún problema, se puso detrás de ella para penetrarla por su culo. Ahí estaba mi novia, recibiendo una doble penetración, que parecía estar transportándola al cielo, por lo que gemía de placer

Ahhhh, así cabrones, folladme bien ... ¿has visto Nacho que dos pollas tengo dentro de mi? qué gusto sentir como se mueven

Claro que veo lo puta que eres, te gustan mucho las pollas grandes, tienes una cara de viciosa ...

Y ahora quiero otras dos pollas más, quiero tener las cuatro al mismo tiempo para mi sola

Cogió la verga de Frank y se la introdujo en la boca, ahora tenía todos los huecos de su cuerpo ocupados por salchichas alemanas, y a la que quedaba libre, que casualmente era la más pequeña, empezó a hacerla una paja. Era una delicia ver como se movía el cuerpo de mi novia de una forma acompasada para producir placer a los cuatro tíos.

La alemana rubia me dijo que quería que diese por culo a su amiga, para ello la puso de rodillas en la arena, se mojo un dedo y se lo fue metiendo poco a poco en su ano para que dilatase, hizo lo mismo con un segundo dedo, lo cual le costó bastante, y luego puso mi capullo en el ojete. Empecé a penetrar ese culito prieto, que me costaba perforar por los gritos de dolor que emitía su propietaria, pero que afortunadamente fueron cambiando a gritos de placer según iba enculándola. Era alucinante dar por culo a esa zorrilla, que se estaba metiendo un par de dedos en su coño húmedo a la vez que la sodomizaba. La rubia se puso en la arena con las piernas abiertas a la altura de la cabeza de la chinita, de tal forma, que podía comerle el pedazo de coño húmedo que tenía su amiga mientras que yo le daba por detrás. Le metía la lengua hasta dentro, gemía de placer, y se acariciaba con una mano las enormes tetazas, y con la otra, su endurecido clítoris.

Las pollas a las que Sara estaba haciendo la mamada y la paja se corrieron las primeras. A pesar de que ya se habían vaciado antes, descargaron una buena cantidad de semen sobre su cara, dejándola con un aspecto de zorra increíble, llena de pegotes blancos por todas partes que relamía sin parar, y con los dos alemanes dándole, uno por delante y otro por detrás

Joder Nacho me pone muy cachonda que estos tíos se hayan corrido en mi cara, me siento una puta

¿Te están follando bien esa dos vergas que tienes dentro? ¿Tienes ganas de que se corran dentro de ti?

Follan de maravilla, el pollón lo siento hasta lo más dentro de mi y luego Hans me está taladrando el culo, es como si ya no dieran mi agujeros más de si, que estuviesen llenos ... es un auténtico placer y por supuesto que quiero que se corran

La alemana rubia pareció excitarse mucho al ver las corridas de su dos amigos en la cara de Sara, ya que intensificó las caricias en su clítoris, lo cual, unido a la lengua de la amiga, hizo que gritase y gimiese en un orgasmo eterno y brutal. Ya no pude aguantarme más y mis envestidas se intensificaron sobre ese culo que no paraba de moverse. Ella agradeció este entusiasmo y se retorció de placer justo antes de que empezase a llenar ese ojete con mi semen. Fue brutal dar por culo a esa zorra, y la puta de su amiga, según terminamos relamió la puta de mi capullo para no perder nada

Menudo cabrón estás hecho, como le has dado por el culo esa puta chupa pollas, me ha encantado verlo

Tu si que eres una auténtica zorra, con esos dos pollones dentro de ti, se te va a quedar el coño más abierto. En ese momento Hans empezó a correrse en su culo mientras le estrujaba las tetas, y no hacia más que gritar de placer

Siiii cabrón lléname con tu leche le decía Sara. Ahhhh, que placer sentir tu leche caliente en mi ojete, me muero de gusto, siiiiiiiii ... ahhhhhh ... sois unos cabrones ... siiiiiiiiiiiii ... me corroooooo

Eres una zorra ... como estas gozando y todavía te queda que se corra el del pollón enorme. Bueno creo que no va a tardar mucho viendo los pollazos que te está metiendo

Siii, tu también correte dentro de mi, dame con esa polla que tienes, nunca había disfrutado de nada igual. Ahhh ... ahora noto los chorretones de leche en mi coño ... jodeeeer, sigue moviéndote que me quiero correr otra vez. Ohhhhhhh, más cabrón ... fóllame más, no pares ... siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ... que buenooooooooo

Fue maravilloso ver como Sara era follada por dos tíos a la vez, sobre todo con esa verga de caballo, y encima, consiguió un orgasmo múltiple, uno a través de ese culazo y otro por su coñito ardiente. Alguna vez conmigo, había conseguido correrse un par de veces seguidas, pero esta situación me había encantado, cada vez que la recuerdo se me pone durísima. Cuando se levantó parecía una auténtica zorra, tenía los dos agujeros completamente abiertos y rojos del roce, además de estar llenos de leche, por no olvidarnos de los chorretones que tenía en toda su cara, una imagen de puta encantadora que tengo fijada en mi mente.

Vaya follada que te han dado esos cuatro tíos, las cuatro salchichas alemanas para ti solita ja, ja, ja ... eres una puta viciosilla que necesita mucho para sentirse satisfecha

No me puedo quejar ha sido una experiencia inolvidable, creo que me voy a dar un baño para limpiarme

No deja que te limpiemos nosotras, es una pena que se desperdicie tanta leche le dijo una de las alemanas

Las dos amigas empezaron a lamer con sus lenguas todos los chorretones de semen que tenía Sara por la boca, el cuello, las tetas, y por supuesto, en el coño y el culo, chuparon todo su cuerpo hasta no dejar ni rastro de semen. Los cinco tíos hicimos un corro para poder ver ese espectáculo único que se ofrecía ante nuestra vista y aunque parezca increíble, nuestras pollas empezaban a querer levantarse, a pesar de la dos corridas anteriores.

Pero la cosa no quedo ahí, a continuación, se pusieron las tres formando un círculo de manera que Sara tenía su cabeza junto al coño de la chinita, ésta chupaba el sexo de su amiga, y ella, se ocupaba de darle placer a mi novia en un triángulo lésbico perfecto. No se entretuvieron mucho antes de que pudiéramos ver las tres lenguas trabajando, se chupaban por todas partes, por los labios, por el interior de estos, se introdujeron las lenguas en las chorreantes vaginas, se frotaron los clítoris. Las tres gemían sin parar, y mientras tanto, nuestras pollas se volvieron a poner duras, empezamos a pajearnos, la escena que nos estaban ofreciendo lo merecía. Tres tías buenísimas, en medio de una playa, se estaban lamiendo los coñitos mutuamente, hasta a un impotente se le habría levantado de nuevo la polla.

Aquello fue una orgía de jadeos, suspiros, gemidos y gritos. Las chicas se retorcían de placer en la arena mientras que nosotros nos corríamos sobre ellas, expulsando los últimos restos de semen que nos quedaban en nuestro cuerpo. Os podéis imaginar la situación con esas cinco pollas corriéndose sobre las tres tías entrelazadas por sus lenguas y coños.

Tras darnos un baño relajante, volvimos al barco y pusimos fin a la excursión. Seguro que ninguno de los siete olvidaríamos lo que ocurrió en aquella playa. Nos despedimos de nuestros nuevos amigos alemanes y volvimos a nuestro apartamento para hacer las maletas.

Bueno Nacho has conseguido que me desinhiba completamente aquí en Ibiza ... creo que lo difícil va a ser volver a utilizar ropa interior otra vez ja, ja, ja me comentaba Sara antes de salir hacia el aeropuerto

No te preocupes cariño, con lo putilla que te has vuelto ya me encargare de que te muestres más ligera de ropa, de lo que estabas acostumbrada. Tenemos que aprovechar lo zorra que te has vuelto ja, ja, ja ... y además, no es necesario que siempre lleves el tanga o el sujetador

No esperaba menos, después de las vacaciones tan liberales que hemos pasado, voy a echar de menos tanta polla junto a mi ... bueno y chochitos morenos para que te los folles

Ya veremos que podemos hacer para satisfacerte, podemos ir a algún restaurante alemán para que comas salchichas rellenas ja, ja, ja ... aunque creo que no te va a parecer lo mismo. En cualquier caso, me encantaría que volviésemos otro año a Ibiza ...

- Fin de la historia -

joseluisartista

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