sábado, 27 de marzo de 2010

Feliz Cumpleaños Cariño

Para que no os perdáis detalle de lo que sintió y de cómo pasó todo, voy a dejar que sea mi mujercita, que adoro, la que os cuente el relato. Ella es Rosa, tiene 36 años tiene un cuerpo delgado y firme, tiene unos senos tersos y bonitos, vientre liso y plano, un coñito debidamente aseado y cuidad y un suculento culo respingón, mantiene gracias a la natación unas piernas duras y un tipo en general agradable, vistoso y apetecible, muy apetecible, dicho esto, os dejo con ella.

Hola, tras esta breve introducción de Benjie en la que veo me ha puesto por las nubes. Y no deja opción a la imaginación. Os voy a contar lo que ocurrió. Benjie mi marido, en sus horas libres es profesor de pintura y trabaja en una academia en una zona rica del norte de Madrid. Una tarde le noté que estaba triste y al preguntarle me dijo que le había fallado una modelo, precisamente esa misma tarde en la que él tenía previsto realizar un examen preparativo. Visto que parecía muy disgustado y como disponía de la tarde libre, con buena fe me ofrecí para hacer de modelo. El me dijo que no serían más de 45 minutos y que además estaba previsto que se le pagase 600 €. No es que nos faltase el dinero, pero ganarme 600 por estarme quieta 45 minutos… “ADELANTE” le dije.
Fuimos juntos a la academia, lleva ahí poco tiempo trabajando y le conocía poca gente, a mi no me conocía nadie, me molestó cuando se cruzó con unos compañeros y no me presentó como su mujer si no como la modelo.

Llegamos a un aula, me invitó a entrar diciéndome que le esperase ahí que iba a por el material. Entré, había tres grupos de 3 ó 4 chicos y chicas, se me quedaron todos mirando. Saludé, pero no recibí ninguna contestación, así que me fui hacia el fondo donde suponía se pondría Benjie. Fueron entrando los alumnos, todos con ropas de marca, era verano. Yo llevaba una falda que me llegaba justo arriba de las rodillas y una camisa azul, con unos zapatos de tacón bajo, entraron chicas a cual más pijas muy jóvenes con sus moviles y risitas tontas, miraban de manera altiva, chicos de esa misma edad también entraban con sus granos de pubertad y cara de salidos. Se me acercó el chulito la verdad que el más mono seguro que era repetidor y como siendo el manda más y el que controla todo me preguntó: “¿tú eres la modelo? “si” contesté y me lanzó una mirada de arriba abajo con una sonrisa que no me gustó en absoluto.
“¿Qué edad tienes?” ni le contesté aunque me quedé con las ganas de mandarle a la mierda.
Por fin llegó Benjie. “bueno chicos, SENTAROS”“ven” me indicó, colocándome al fondo en el centro, subida en un altillo de tres metros por tres.
“venga prepárate”Me quedé quieta, no entendía lo que quería.
Se giró y empezó a repartir unos bloc “tenéis 15 minutos para la prueba 1. Después pasaremos a la dos. ”El listillo levantó el brazo diciendo:”pero profe… ” Mirándome a mi, como diciendo: ¿y esta qué? Se giro Benjie y me dijo: “venga cielo, ¿que esperas? desnúdate ya”“¿QUEEEE?”La mirada de Benjie fui fulminante, como diciendo, NO ME JODAS…HAZLO YA…Parecerá una estupidez, pero no contaba con que sería un posado desnudo, menos que mi marido accediese a ello y aún más que tuviese que desnudarme frente a cerca de 25 alumnos jovencitos que se tirarían todo el año pajeándose recordándome ahí desnuda frente a ellos.

Todos se me quedaron mirando incluido Benjie, reinaba un silencio absoluto, yo no sabía si salir corriendo, miré a mí alrededor, nada… yo y mi circunstancia, o huía u obedecía. Ahí, expuesta empecé a desabrochar uno a uno los botones de mi camisa, no me atrevía a mirar a los chicos, pero notaba como todos me clavaban los ojos, me quité la camisa y quedé con mi sujetador blanco el cual me di cuenta que con el nerviosismo, el frío y la excitación, mis pezones endurecidos se marcaban en la fina tela. Vi que detrás de mi había una silla, tiré en ella la camisa. No sabía por donde continuar me quité los zapatos, y volviendo al centro como si de una obligación se tratase, desabroché el botón lateral de la falda y bajé la cremallera, casi sin hacer nada la falda cayó a mis pies, quedando en ropa interior frente a 25 chicos a cual más salido y mostrando mis piernas desnudas y morenas vi como algunos abrían aún más los ojos, miré hacia Benjie y ni siquiera estaba mirándome. Me agaché cogí la falda y la tiré hacia la silla y como de manera de autodefensa esperé así a ver si con esto bastaba, pero solo pasaron 5 segundos que por los ronroneos de la clase, Benjie les miró y se giró, para acercarse y decirme: “ cielo el dibujo es de un desnudo y no de ropa interior por favor quítate el sostén y la braga” no tuvo que decirme más, me giré hacia la silla, desabroché el sujetador y acercándome a la misma retiré mi sostén dejándole caer en el respaldo, mis tetas notaron rápidamente el aire acondicionado y su desnudez empitonándose aún más mis pezones.

Ahí mismo sin más dilación metí mis manos por ambos lados de las braguitas y las bajé con una vergüenza horrorosa, ya que no solo estaba quedando desnuda frente a toda la clase si no que además le ofrecía un streap tease. Mi blanco culo, quedó frente a todos y para más desgracia me tuve que agachar para recoger la braga dejándoles que se recreasen en mis nalgas en pompa. Completamente desnuda, me giré, hacia los 50 ojos y 25 bocas entre abiertas. Se escuchó un ohhh Ummmmm, me imagino que sería al ver por fin mi sexo . Tragué saliva, me temblaban las manos, pero mi miedo no era otro que el que notasen que mi sexo estaba humedeciéndose por segundos. Benjie se acercó, fue hacia la silla recogió toda la ropa y la llevó detrás de un biombo que había más al fondo, al ver dicho biombo, me mosquee mucho ya que me podría haber ahorrado el bochornoso streaptease que les había hecho a esos mocosos simplemente escondiéndome tras el.

Hablo Benjie: “bueno empecemos con la prueba uno se llamara “DESNUDO POSTURA A SOLAS” miró su reloj y la puerta como si esperase a alguien. Subió de nuevo y se me acercó, diciéndome: “colócate aquí” llevándome al medio “ me giró quedando de lado a toda la clase, cosa que me alegre pues de esa manera no tenían que pintarme de frente y fijarse en mi sexo, si no en mis fuertes muslos “ vale y ahora ponte en cuclillas” “ qué” le miré asustada. “ y mostrándome como quería que me quedase se colocó en una postura que adoptas cuando vas al los servicios para hacer de vientre, pero te encuentras que solo hay un sitio donde colocar los pies y abajo un agujero.
Separando ambas piernas. Estuve a punto de negarme, pero alucinada y pensando que eso hubiera hundido a Benjie accedí a hacerlo. Afortunadamente no tenía a nadie detrás ya que mi culo mostraba TODO quedando inevitablemente abierto. Me colocó las manos encima de mis muslos justo arriba de las rodillas, de manera que la postura parecía aún más humillante ya que parecía que las ponía para apretar. Obviamente por delante mi sexo también quedaba completamente expuesto con mis labios entre abiertos y mi zona más rosita brillando por el flujo de la excitación, pero por ahí tampoco me podía ver ninguno de los alumnos que por supuesto no me atrevía mirar. “aguanta lo que puedas cielo” me soltó Benjie, estaba para mandarle a la mierda y levantarme, pero el subconsciente me volvió a jugar una mala pasada y le sonreí contestándole “vale no te preocupes”. Me lanzó una mirada de arriba abajo, desde el frente y clavando sus ojos en mi coñito, me sonrió. “EMPEZAD” El no dejo de girar de un lado a otro como observándome.

Me dolían las piernas y notaba como se me iban durmiendo los pies. A los tres minutos empecé a tambalearme a hacer amagos de levantarme para relajar los músculos y eso que estoy preparada. De repente llamaron a la puerta se acercó a ella Benjie y al abrir vi a un chico de unos treinta tantos años, pelo rizado cuerpo atlético, con rasgos árabes. Benjie parecía recriminarle que llegaba tarde ya que le mostraba su reloj. Al estar mirando me fije en la pandilla de niñatos que incomprensiblemente parecían muy concentrados en su pintura. Todos salvo el listillo, que bajaba la cabeza y hacia que se asomaba como para ver más, con una sonrisa que decía “que ya te descuidarás ya”. Me quiñó el ojo y sacó la lengua, le hubiera estrangulado. Empecé casi a no sentir los pies y en uno de los muchos levantamientos leves que hacía de cara a relajar los músculos, perdí el equilibrio cayendo de culo, con las piernas abiertas frente a todos ellos.
“JA JA JA JA” fueron las risas de toda la clase. Me quedé sentada humillada y tapándome. Benjie se acercó gritando: “SILENCIO, TENEIS UN MINUTO PARA IR ACABANDO.” Subió y me incorporó.
“¿Estás bien?” me preguntó. Una vez más y sin entenderlo le contesté que si, pero que me dolían las piernas.
“OK vete detrás del biombo ahora te llamo.” Como si de una sumisa y obediente se tratase le pregunté: “¿me quedo desnuda?”“si, claro quedan dos pruebas cielo” “vale cariño”Y me fui hacia el biombo mientras Benjie se puso a recoger las pinturas, algunas por el incidente o por estar en exceso distraídos, no habían pintado más que mis piernas dobladas...

Al llegar al biombo me encontré con el chico árabe, por cierto muy guapo.
“hola dijo el” mientras se quitaba la ropa.
“hola” le contesté, poniéndome la camisa como una chica pudorosa.
“me llamo Abdeslam, no te vistas si ahora seguimos” me dijo quitándose ya la camisa mostrando un cuerpo precioso fibroso y musculoso.
Me quedé como una boba mirándole y simulando ser una experta en el tema le dije: “si tranquilos, es que tengo un poco de frío” Me ofreció una silla baja que quedaba justo enfrente de él, “siéntate y descansa.” No quería hacerlo por la proximidad de ambos cuerpos y además al sentarme mi cara quedaría a la altura de un increíble paquete que ya me mostraba debajo de su slip, pero no podía más y necesitaba sentarme. Fue sentarme y el quitarse el slip quedando completamente desnudo. Su miembro quedó a escaso medio metro de mi cara, mediría unos 22 cms., la tenía rasurada. Sentí como un calor intenso y del subidón me tuve que poner de pie. “¿estás bien” preguntó.
“si si, gracias” afortunadamente. Llegó Benjie, venga vamos con la prueba dos.
Al salir Abdeslam, los ojos de la chicas parecían salirse de las orbitas algunas hasta incluso se llevaron la mano a la boca como asustadas. Ellos se miraban riendo como si eso fuera algo fuera de lo normal. No sabía lo que me esperaba. Nos colocamos en el medio y vi que tenía un aparato de música preparado. Benjie gritó: empieza la prueba “DESNUDO EN MOVIMIENTO MIXTO, RECORDAR ELEGIS A QUIEN QUEREIS DE LOS DOS PINTAR” Y SOLO CONTAIS CON 10 MINUTOS. ¡YA!Le dio a la música y empezó a sonar una música lenta, creí morirme cuando, Benjie le indicó a Abdeslam de empezar, me cogió y me agarró para bailar un slow, notaba como su aparato chocaba una y otra vez contra mi muslo y mis erectos pezones se clavaban en su musculoso pecho. M e excitaba por segundos. A los tres minutos cambió la música y empezó música movida, el empezó con mucho estilo a bailar llevando su miembro de un lado a otro. Yo como una estupida tratando siempre de quedar de espaldas a los chicos, bailé como una pánfila, pero Abdeslam con la inercia del baile hizo que acabase de frente a ellos. Directamente vi que había algunos que ni siquiera pintaban. Y por último sonó la LAMBADA, no se si recordáis ese baile, es un baile brasileño muy, muy sexy el cual se entrecruzan las piernas de ambos y aprietan ambos muslos.

Abdeslam parecía un experto bailando, me agarró y me dejé llevar, notaba como su miembro cada vez menos flexible y más terso y aún más largo rozaba con mi humedecido sexo, estaba a cien, soñaba con que me penetrase ahí mismo, ya todo me daba igual, de repente me agarró tenía dudas que fuera de manera involuntaria reiteradas veces mis senos. Estaba que no veía más que a Abdeslam bueno más que su cuerpo. Pero al cortarse la música y al quedar todo de nuevo silencioso me di cuenta de la cruda realidad. Estaba dando un espectáculo a un grupo de chicos, mostrando absolutamente todas mis intimidades. Benjie me indicó que nos fuéramos a descansar de nuevo y nos dirigimos de nuevo detrás del biombo. Abdeslam llegó primero me giró y sin decir una palabra me cogió de las caderas abrazándose y con suma facilidad, más teniendo en cuenta las medidas, me penetró ahí mismo, no pude más que soltar un grito, pero que coincidió con la fuerte voz de Benjie que indicaba que daría comienzo la tercera prueba y que estaba por ahora muy descontento con los resultados y lo que estaba viendo.

Me abracé al inmenso torso de Abdeslam y de pie apoyados en la pared, de nuevo haciendo fuerza para mantenerme noté las embestidas de Abdeslam, no podía resistirme, necesitaba gritar, para evitarlo le clavé las uñas en la espalda, él me mordisqueaba cuello, tetas, pezones, me sujetaba el culo abierto y con un dedo de la mano jugueteaba con mi ano. No podía parar, Benjie estaba a escasos metros detrás de ese biombo. Pero no podía… debía de parar era una locura, escuché a Benjie llamarnos, y le solté estaba despeinada, ambos sofocadísimos, rojos, sudados, atontados… el con su miembro enrojecido y aún erecto… volvió a llamarnos, me limpié y peiné y salí, dejando a Abdeslam que se le bajase la “fiebre”. Todos se quedaron atónitos al verme, mi cuerpo brillaba del sudor, salí sin como antes hacía taparme, se me notaba el cuello y los senos enrojecidos, los chicos algo notarían, pero si está claro que Benjie lo notó. Más cuando apareció Abdeslam aún con su miembro medio despierto y descompuesto por el esfuerzo realizado.
Benjie cambió de sitio los asientos eran dos banquetas bajas alargadas que estaban puesta de manera que quedáramos uno de frente del otro, pero ladeados por completo de las miradas de los pintores. Los colocó lo suficientemente para que uno al otro nos mirásemos, pero con la inclinación suficiente para que todos nos vieran de frente.
“Sentaros cada uno en una banqueta” nos indicó Benjie con una voz notablemente autoritaria. Ambos entre considerándonos culpables y los malos de la película obedecimos. La postura era incómoda porque eran demasiado bajos. “SEPARAR BIEN LAS PIERNAS” ordenó, ambos nos miramos, y considerando que formaba parte de nuestro castigo obedecimos. Mostré mi sexo abierto ante todos. Abdeslam no se si porque le continuaba el calentón o por la situación se encontró despatarrado y con su descomunal miembro casi totalmente erecto. Por supuesto las caras de los chicos era digna de ver, no se cortaban y algunos se levantaban para verme mejor. BIEN AHORA EMPIEZA LA ULTIMA PRUEBA Y SE LLAMA “SEXO PRIMER PLANO”. Pensé que me moría al oír el titulo. Pero aun mas cuando se me acercó y puso las manos en mis hombros, pensaba que me iba a mostrar los distintos arañazos, pero no… tenía otro plan peor, me tumbó en la banqueta baja dejando mi culo al extremo del mismo y me subió los pies arriba, para después separarlos al límite del borde de la silla, vamos como si fuera mi ginecólogo y me fuese a pasar la revisión, no contento con eso me colocó un cojín levantando aún más mi culo y separando más si cabe mis muslos.

Cerré los ojos, para entonces sabía que 25 chicos y Benjie se estaban recreando viéndome en esa postura, entregada por completo y como si fuera aquello una muestra de exposición ofreciendo mis más íntimos agujeros a todos ellos. Lo malo era que me notaba cada vez mas excitada. Giré la cabeza y pude ver como, Abdeslam estaba de pie, con las piernas separadas su pene completamente erecto y vi como Benjie sin cortarse le desnudaba el glande, apareciendo una gotita en su punta, que no tuvo problema de limpiar. “BIEN RECORDAR QUE DEBEIS DE ELEGIR UNO SOLO Y QUE OS PODEIS ACERCAR CON VUESTRO BLOC PARA CONSEGUIR EL MAXIMO DETALLE. El alboroto fue total de sillas sonando y de pasos queriéndose acercar a nosotros. UN MOMENTO, HACEMOS UNA FILA PARA CADA UNO Y CADA UNO DISPONDRA 1 MINUTO.

Alucinada me incorporé como pude y lo único que vi fueron dos colas una de chicas frente y a escasos metros de Abdeslam, y otra de todos los niños salidos además de tres chicas en mi cola. La primera fue una chica que se acercó, traté de mirarla, no paraba de pintar seguro que era la empollona, me quedé flipada cuando me suelta dejando de pintar: “apreté los labios” no sabía que hacer, pero entendí que lo mejor era acabar cuanto antes. Y como pude separé mis labios mostrado mi zona rosácea. “muchas gracias” y se marchó, después pasaron como 4 ó 5 que ni pintaban ni nada se acercaron y casi metiendo sus cabezas entre mis piernas, se asomaban a mi agujero, como esperando que saliese algo. A otros notaba hasta su respiración sobre mi sexo. Pero casi me relajé, pasaron las dos otras chicas que no dejaron de pintar. Cuando pensaba que ya se había terminado, escucho. “mhm hola” la voz hizo que se me pusiera la piel de gallina, era el niñato chulo de antes. Como ya se habían sentado casi todos, Benjie les estaba vigilando. Dando la espalda al cabrito del niñato. Noté algo desagradable en mi entrepierna y es que estaba con la punta del pincel jugueteando con mis labios vaginales. Me incorporé como para avisar a Benjie, y me dijo “será mejor que no lo hagas que le tienes contento yo se bien cuando esta cabreado” continuó, pero ya utilizando su dedo índice, con la yema del dedo empezó a acariciarme el clítoris, ya se que es imperdonable, pero parecía un maestro de la masturbación. Sin cortarse un pelo empezó ahí mismo a masturbarme, me introdujo uno y después dos dedos.

No comprendía como Benjie no se había dado aún la vuelta. Cuando ya estaba en el séptimo cielo y parecía enloquecer, abrí los ojos y vi como tenía a escasos centímetros de mi boca la inmensa herramienta de Abdeslam, a punto de abrirse paso en mi boca entre abierta, no pude más que recibirla y saborear su sabor intenso mientras poco a poco se iba introduciendo y perdiéndose en mi boca, casi me provocó una arcada, pero fue la única como si de un medidor se tratase no volvió a ir más allá y le pude hacer una mamada en toda la regla, estaba en otro mundo totalmente extasiada, por supuesto ajena a que Benjie estaría ahí y los 25 mirones también cuando sentí como sin dejar de masturbarme el “macarra” me estaba penetrando, sintiendo un inmenso placer y una vez más con todo mi cuerpo se removía al son de un nuevo orgasmo, entre éxtasis y éxtasis abrí de nuevo los ojos y al lado del macarra estaba Benjie completamente desnudo masturbándose y esperando turno para follarme. No entendía nada, de repente noté en mi vientre el calor de una corrida era la del macarra, que tuvo la delicadeza de salirse para chorrear toda su leche sobre mi, dejó de masturbarme y empezó a relamerme y sobetearme las tetas mientras Benjie me cogió y me levantó aún más el culo, subiéndome las piernas arriba y con la ayuda de la cantidad de distintos flujos lubricó mi ano y empezó a introducir su falo tieso en mi culo, dejando libre mi coñito que poco tardó en saborear el macarra tumbándose encima de su propia corrida y clavándome su nariz en mi interior y mordisqueándome el clítoris, pensaba que moría, cuando de repente y como si estuvieran debidamente coordinados noté como Benjie se corría dentro de mi y como se me inundó la boca con el semen de Abdeslam a la vez que una vez más parecía a punto del desmayo con un orgasmo más no me quedó más que tragarme el semen de Abdeslam que aún sacudía en mis labios con su polla exhausta.

Noté por fin como uno y otro se apartaban y como se alejaban tras breves segundos y haberme recuperado algo, me incorporé atolondrada sin entender nada de lo que había pasado, reinaba un silencio absoluto, me incorporé del todo como sacudiéndome y vi que ahí estaba Benjie, con una sonrisa picarona de haber disfrutado, se me acercó y abrazándome me dijo: “FELIZ CUMPLEAÑOS CARIÑO” no entendía nada, “ehh a que te refieres” le pregunté aún saboreando el semen de Abdeslam en la boca“que el sábado es tu cumpleaños y este ha sido tu regalo”. Pensé en levantarme y pegarle, matarle, insultarle… pero NO… Me abracé a él y le di las GRACIAS. Pero de repente me entraron mil dudas y pregunté.
“¿y los chicos? ¿Y Abdeslam? ¿Y el macarra que me masturbo? “Los alumnos han realizado correctamente su examen y cuando Juan que es un contratado te masturbó ya estaban todos fuera de clase. Y Abdeslam es otro boys contratado.
“JOOODEERR, gracias cariño, muchas gracias.”Salieron ya vestidos de detrás del biombo los 2 boys y sonrientes se me acercaron y dieron un beso, “ciao hasta otra” Adiós bombón, soltó el macarra”“ADIOS”, les contesté y “gracias.

Así ocurrió todo y así os lo ha contado la principal protagonista.

Benjie Benjie50

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